La Alcalinidad en la piscina

La alcalinidad es un factor crucial para mantener el agua de tu piscina en perfectas condiciones. Pero, ¿sabes realmente qué es y cómo afecta a tu piscina?

Alcalinidad en la piscina

¿Qué es la alcalinidad?

La alcalinidad se refiere a la capacidad del agua para neutralizar los ácidos. En términos simples, es una medida del contenido de bicarbonato, carbonato y hidróxido en el agua.

Un nivel adecuado de alcalinidad ayuda a proteger tu piscina contra cambios bruscos de pH. Es como un colchón que amortigua el agua, evitando oscilaciones rápidas y extremas en el nivel de pH.

Factores que afectan la alcalinidad

Diversos factores pueden influir en la alcalinidad del agua, como la lluvia ácida, los productos químicos y el agua de relleno.

  • Lluvia ácida: La lluvia puede contener contaminantes atmosféricos que la vuelven ácida. Cuando esta agua entra en la piscina, puede disminuir la alcalinidad al diluir el contenido alcalino del agua o al introducir ácidos.
  • Productos químicos: El uso de productos químicos para el mantenimiento de la piscina, como cloradores, alguicidas o productos para ajustar el pH, puede influir en la alcalinidad. Es esencial seguir las instrucciones de dosificación y verificar la alcalinidad después de añadir cualquier producto.
  • Agua de relleno: Dependiendo de la fuente, el agua utilizada para rellenar la piscina puede tener una alcalinidad naturalmente alta o baja. Si usas agua de pozo, por ejemplo, es posible que tenga una alcalinidad diferente al agua de red pública.
  • Calor y luz solar: La exposición prolongada al sol puede provocar la evaporación del agua, lo que concentra los minerales en la piscina y puede aumentar la alcalinidad.
  • Materia orgánica: Hojas, insectos, polen y otros desechos orgánicos pueden introducir ácidos al descomponerse, lo que puede disminuir la alcalinidad del agua.
  • Uso de la piscina: Una alta afluencia de bañistas puede introducir sustancias como lociones, bronceadores, sudor y orina, que pueden alterar la alcalinidad.
  • Equipo de la piscina: Materiales como el cemento o la cal en el revestimiento y las baldosas de la piscina pueden liberar compuestos alcalinos en el agua, aumentando la alcalinidad.
  • Desinfección: Algunos métodos de desinfección, como los generadores de cloro a base de sal, pueden tener un impacto en la alcalinidad del agua a lo largo del tiempo.
  • Balance químico: La relación entre el pH, la dureza del agua, el nivel de ácido cianúrico y otros factores químicos puede influir en la alcalinidad. Un desequilibrio en uno de estos elementos puede desencadenar cambios en la alcalinidad.

Cómo medir la alcalinidad

Conocer el nivel de alcalinidad es esencial para mantener tu piscina en excelente estado.

1. Preparativos: Antes de realizar la medición, asegúrate de que la piscina haya estado en funcionamiento durante al menos una hora. Esto ayuda a que los productos químicos y las impurezas estén bien distribuidos en el agua.

2. Herramientas necesarias:

  • Kits de prueba: Estos kits suelen contener soluciones líquidas o tiras reactivas diseñadas específicamente para medir la alcalinidad total del agua. Están disponibles en tiendas de suministros para piscinas y acuarios.
  • Vaso de medición: Muchos kits vienen con su propio vaso, pero si no es así, asegúrate de tener un recipiente limpio y seco para tomar la muestra de agua.

3. Proceso de medición con tiras reactivas:

  • Llena el vaso de medición con agua de la piscina, tomando la muestra desde una profundidad de unos 30 a 45 cm.
  • Introduce la tira reactiva en el agua y déjala el tiempo indicado en las instrucciones, generalmente unos segundos.
  • Retira la tira y compara el color que esta muestra con la escala de colores proporcionada en el kit. Cada color corresponde a un nivel diferente de alcalinidad.

4. Proceso de medición con solución líquida:

  • Llena el vaso de medición con agua de la piscina.
  • Añade la cantidad indicada de solución líquida del kit a la muestra de agua.
  • Agita suavemente el vaso para mezclar.
  • Observa el cambio de color del agua. Al igual que con las tiras reactivas, compara este color con la escala proporcionada en el kit para determinar el nivel de alcalinidad.

5. Interpretación de resultados: La alcalinidad se mide generalmente en partes por millón (ppm). La mayoría de los expertos recomiendan mantener la alcalinidad total de una piscina entre 80 y 120 ppm, aunque estos valores pueden variar ligeramente según el tipo de piscina y la región geográfica.

6. Frecuencia de medición: Es aconsejable medir la alcalinidad al menos una vez a la semana. Si estás ajustando la alcalinidad o el pH, o si has añadido una gran cantidad de agua fresca a la piscina, puede ser necesario medir con más frecuencia.

Problemas comunes y soluciones

Alcalinidad baja

Puede provocar corrosión en los equipos y un pH inestable. La solución es añadir bicarbonato sódico, cómo nuestro producto Alka+, diseñado específicamente para este propósito.

Alcalinidad alta

Puede causar problemas como agua turbia y formación de escamas. La solución es añadir un reductor de alcalinidad, como nuestro producto Baja TA, para equilibrar los niveles de alcalinidad.

Beneficios de mantener la alcalinidad

Mantener un nivel adecuado de alcalinidad garantiza una vida más larga a los equipos de tu piscina, un agua más clara y un baño más saludable.

Conclusión

La alcalinidad es un elemento esencial para el cuidado de tu piscina. Asegúrate de medirla regularmente y ajustarla según sea necesario para disfrutar de un agua limpia y saludable.

Preguntas frecuentes

  1. ¿Qué nivel de alcalinidad es el ideal para mi piscina?
    • Generalmente, se recomienda mantener la alcalinidad entre 80 y 120 ppm.
  2. ¿Con qué frecuencia debo medir la alcalinidad?
    • Al menos una vez a la semana.
  3. ¿Puedo nadar si la alcalinidad está alta o baja?
    • Es mejor ajustar la alcalinidad antes de nadar para evitar problemas de salud o daños en la piscina.
  4. ¿Los productos químicos para ajustar la alcalinidad son seguros?
    • Sí, pero siempre sigue las instrucciones del fabricante y mantén los productos fuera del alcance de los niños.
  5. ¿La alcalinidad y el pH son lo mismo?
    • No, aunque están relacionados. La alcalinidad afecta cómo se mueve el pH, pero no son lo mismo.
      • El pH mide la concentración de iones de hidrógeno (H+) en una solución, lo que determina si una solución es ácida, neutra o básica (alcalina).
      • En cambio, la alcalinidad se refiere a la capacidad del agua para neutralizar ácidos, es decir, es una medida de la resistencia del agua a cambios en su pH. Está relacionada con la cantidad de compuestos alcalinos, como bicarbonatos, carbonatos e hidróxidos, presentes en el agua.